jueves, diciembre 09, 2004

En Busca del Topacio Lacio: 1era Parte

Hace un calor de los mil demonios, y llueve como los diablos al mismo tiempo en Shakhrisyabz, al sur de Uzbekistan... los burritos uzbekos y cabras uzbekas se mojan uzbekamente por la estepa uzbeka, buscando refugio...si, uzbeko. El viejo Schmartek reclama por la escasez de vodka en la region, a causa del robo del ultimo cargamento que llegaba a la ciudad, a manos de los Streptonautas, mafia bastante truculenta y monocromatica que con frecuencia ocasionaba malestar entre los habitantes.
-Otra vez estos condenados Streptonautas!- vocifera Schmartek-. Con esta lluvia monzona me vendria bien un trago! Cuando podre jubilarme como la gente y pasar mis vacaciones en Tehuantepec???
-Tranquilo, Schmartek- le dice su gran amigo de toda la vida, Schmeckma.- Solo falta un año para jubilarnos, ya podremos cumplir el sueño de nuestras vidas; ademas, Tehuantepec esta a solo a 250 dias de viaje en burro, solo tenemos que encontrar a alguno que aguante - lo calmaba-.
-La ultima vez que viaje en burro, llegue solo hasta Perwekistan, y murio el condenado animal! Como saldre de aqui alguna vez? Nadando por el Indico??? Rebeca! Consigue un vodka para este destartalado saco de huesos!

La pequeña Rebeca hizo caso a su padre, y partio al mercado (negro, que el blanco estaba a 10 cuadras, y con ese calor infernal era un suplicio llegar), en busca de algun mercante que pudiera conseguir vodka. Bueno, no era tan pequeña. en realidad estaba bastante crecidita. De hecho, ya estaba en edad de merecer...lo...que nadie se atrevia a darle, por su caracter surrealista. Era una niña solitaria, y poco comprendida por los demas niños; solo contaba con la compañia e incondicional amistad de su mascota inseparable, el mono Kimono.
-Kimono! Ven, que nos vamos al mercado a buscar vodka para papa!
-Konnichiwa, bishii ona no toda, watashi wa Kimono-san, hajime mashite- responde el mono Kimono-.
-Ya se que quieres practicar tus lecciones de japones, pero no tenemos tiempo que perder...tenemos que encontrar algun mercante que traiga vodka de contrabando, o algo que se le parezca, papa esta algo nervioso- le increpa Rebeca, pues aparte de surrealista, era algo impaciente.
-Esta bien -responde Kimono- pero deja al menos pintarme la cara? Necesito llevar mi pintura de guerra, como simbolo de mono Samurai orgulloso de mi estirpe macaca! Ughh ughhh!
-Rapido, por favor! no tenemos todo el dia! Ademas, en cualquier momento se larga a llover, y con este monzon endemoniado se me echa a perder mi peinado de chocolate.

Rebeca, luego de darle un masaje al mono, parte junto a el rumbo al mercado (negro, por si acaso). Soportando un humedo y luciferico calor, nadando entre la densa muchedumbre, se abren paso hacia su destino. Entre los rostros ajados y barbudos, Rebeca reconoce a uno de los mercaderes...
-Prozack! Tanto tiempo sin verte! Que tienes de nuevo?
-Pero no es acaso...la pequeña Rebeca??? -exclamo Prozack, el mercader. Prozack era un veterano entre los contrabandistas, de caracter afable y relajado, de rostro inmutable y curtido por el sol que ilumino tantas de sus innumerables aventuras por el oceano Indico.
-Siii! Es que esto de las hormonas...tu sabes...una cambia, jijiji -responde coquetona Rebeca, que aparte de uzbeka, era tambien un poco chambeca-. Me mando mi padre a buscar algo de vodka, pero como los Streptonautas robaron el ultimo cargamento que llegaba a la ciudad, pense que podrias conseguirme un poco a cambio de...algo...no se que...tu diras...tu sabes que papa se pone nervioso cuando llega el monzon y lo encuentra sin su dosis.
-Bueno, bueno, bueno...hay algo que me vendria bien -respondio Prozack, con una sospechosa sonrisa en el rostro, mientras acariciaba su barba-. Me preguntaba si...me podrias prestar el mono?
-Y como para que seria? El mono no se lo presto a cualquiera!
-Solo por la tarde, para descargar mi cargamento, no necesito mas que eso -respondio risueño Prozack-.
-Esta bien. Kimono, tendras que trabajar esta tarde con Prozack, no tengo dinero y tengo que ayudar en casa...hazlo por mi y por papa, esta bien?
-Hmmmmmm...claro, como siempre, te quedas sin dinero y pagas prestando el mono, total, para eso esta el mono, cierto? -responde algo molesto el mono Kimono-. Lo siento, no te preocupes, todo estara bien, Rebeca. Ademas, trabajar con Prozack sera un buen ejercicio para mantener mi cuerpo y espiritu unidos, como un verdadero Samurai!
-Bueno, ya que hemos logrado un acuerdo...ven Rebeca, acompañame a la tienda, tengo lo que necesitas aca abajo...del estante...Cuidado, que es fragil, y que no te descubra nadie, esta bien?
-Promesa -responde sonriente Rebeca-. Pero dejame probar un poco, a ver si es el mismo que le gusta a mi papa...no voy a llevarle cualquier cosa despues de prestar el mono, cierto?
-No hay problema -responde Prozack- , todos mis clientes se van satisfechos! Toma, prueba de este vaso!
Rebeca prueba algo del vodka de Prozack, y aparte de uzbeka y chambeca, quedo algo turuleca. Convencida de que realmente es vodka, se despide del mercader y de Kimono, y se vuelve dando tumbos a casa, con pasos vacilantes, pues de tan turuleca quedo tambien algo patuleca...pero llegando a la esquina, pasos antes de su casa...
-Que diablos??? No puede ser!!! - exclama Rebeca-
-Rebecaaaaaaa!!!!!!



(...continuara)

No hay comentarios.: